La gira de seis días por Latinoamérica del Secretario de Estado, Rex Tillerson, comenzó con un severo discurso desde la Universidad de Texas contra el gobierno de Nicolás Maduro. El jefe de la diplomacia estadounidense instó al mandatario venezolano a “regresar a la Constitución y retomar el proceso democrático» en el país, y no descartó que el ejército venezolano sea el que propicie el cambio de gobierno en Venezuela, aunque tampoco desestimó que sea el propio Nicolás Maduro quien dimita, porque a su juicio, sería «más fácil».
Estas declaraciones dan inicio a este periplo por cinco países de la región. En México, por ejemplo, se encontrará con la posición del gobierno de no seguir apoyando como mediador en el diálogo entre la oposición y el oficialismo. Al llegar a Perú, país que ha propiciado la coalición internacional llamada Grupo de Lima, la gira llegará a su punto más álgido. Lo mismo ocurrirá en territorio colombiano y argentino, dos Estados que han condenado la violación de Derechos Humanos en Venezuela.
Tillerson ha reconocido que Estados Unidos trabaja en conjunto con el Grupo de Lima y la OEA «para fomentar mayor apoyo para una acción coordinada para combatir la dictadura de ese país».
El discurso oficial de la administración Trump ha variado en los últimos meses y se ha resaltado la «ayuda multinacional» para apoyar la restauración democrática. La asesora especial del presidente Donald Trump, Helen Aguirre Ferré, comentó en una reciente entrevista que el gobierno de Estados Unidos tiene “una operación mucho más amplia de lo que la gente se puede imaginar” para restaurar la democracia en el país sureño de “manera multinacional”.
#Tillerson: El pueblo venezolano sufre por un régimen corrupto que roba a su propio pueblo. El régimen de #Maduro es el verdadero culpable y debe rendir cuentas. #EEUU #Venezuela pic.twitter.com/TD1Ef0Nb5F
— Jorge Agobian (@JorgeAgobian) 1 de febrero de 2018
Incluso Donald Trump se estrenó en su primer discurso del Estado de la Unión fustigando contra los regímenes «socialistas y comunistas» de Cuba y Venezuela, hecho que analistas políticos de ambos países han catalogado como un gran avance en la política exterior de Estados Unidos contra los países caribeños.
El embargo podría estar en la mesa
Fuentes aseguran que Tillerson buscaría en este viaje a Latinoamérica encontrar apoyo para avanzar al bloqueo económico a la empresa estatal de petroleo de Venezuela». La propuesta de Estados Unidos llegaría a la mesa debido a que en la región no es bien vista la «opción militar» o la «ayuda humanitaria».
El analista internacional y experto en seguridad nacional, Luis Fleischman, coincide en que «la mejor opción en este momento es un embargo total, sanciones totales con el objetivo de tirar abajo al gobierno de Maduro, creando disidencia interna para que militares y funcionarios del Estado lo abandonen».
A las declaraciones de Tillerson en la Universidad de Texas, en Austin, respondió este viernes el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López. Dijo que los señalamientos del Secretario de Estado son «muy graves» y que «tiene sus días contados». Padrino aseguró que Estados Unidos propicia los problemas del país sureño a través de su «bloqueo económico».
.@vladimirpadrino: #Tillerson desconoce la realidad venezolana. Los problemas de #Venezuela son propiciados por #EEUU para quebrar al país.
— Jorge Agobian (@JorgeAgobian) 2 de febrero de 2018